La demencia es un término general que se utiliza para identificar a una persona con deterioro cognitivo severo, el cual imposibilita el funcionamiento independiente de la persona. Por ejemplo, una persona con demencia es aquella que, debido a un deterioro severo en la memoria o el sentido de orientación (u otra función cognitiva), no puede hacer tareas diarias como como manejar su vehículo, hacer sus compras, cumplir con sus responsabilidades laborales, o manejar su dinero independientemente.
Es importante resaltar que la demencia no es parte del envejecimiento normal o saludable, y que hay muchas posibles causas de demencia. Alguas causas de demencia son reversibles o curables, y otras causas son irreversibles o incurables. La causa más común de demencia irreversible es la enfermedad de Alzheimer, la cual es una enfermedad neurodegenerativa del cerebro. La enfermedad de Alzheimer, así como otras enfermedades neurodegenerativas, causan un empeoramiento lento y gradual de las funciones cognitivas de la persona a lo largo de muchos años debido al daño progresivo de las células cerebrales, las neuronas. Los síntomas de la demencia de tipo Alzheimer varían de persona a persona y dependent de ue regiones del cerebro se ven afectadas por la enfermedad. Los síntomas pueden incluir problemas de memoria, cambios en el estado de ánimo y personalidad, dificultades para caminar, dificultades para hablar, problemas de orientación, u otros síntomas neurológicos.
Es importante recalcar que si bien es cierto que una persona con demencia muestra deterioro cognitivo severo, no todas las personas que notan un cambio en su memoria, o cualquier otra función cognitiva, tienen demencia. Es decir, los cambios cognitivos leves pueden ser parte normal del envejecimiento saludable de una persona.
¿Cuáles son las causas de la demencia?
Es muy importante que una persona con demencia sea evaluada cuidadosamente por un médico especialista, ya que existen muchas posibles causas de demencia, algunas de ellas reversibles o tratables. Cada causa de demencia requiere de un tratamiento y manejo clínico distinto. Cuando se trata de la demencia causada por enfermedades neurodegenerativas, sabemos que éstas ocurren debido a la acumulación progresiva de distintas proteínas patológicas en el cerebro, las cuales dañan las neuronas cerebrales y consecuentemente producen deterioro cognitivo progresivo en la persona. La enfermedad de Alzheimer, por ejemplo, se caracteriza por la acumulación progresiva de las proteínas beta-amiloide (placas amiloides) y tau (nudos neurofibrilares), mientras que la demencia con cuerpos de Lewy, por ejemplo, se caracteriza por la acumulación progresiva de la proteína alfa sinuceína. Cada enfermedad neurodegenerativa produce la acumulación progresiva de distintas proteínas patológicas en distintas regiones del cerebro, y por ende cada enfermedad neurodegenerativa conlleva a distintas manifestaciones clínicas en la personaa lo largo de años, culminando en un estado avanzado de demencia.
¿Cómo se relaciona la edad con la demencia?
Mientras mas vive una persona, mayor es su riesgo de desarrolar demencia. Es decir, la demencia es más común a medida que las personas envejecen. Se estima que alrededor de 40% de las personas mayores de 85 años viven con demencia. Sin embargo, esto no quiere decir que la demencia sea parte del envejecimiento normal. Todo lo contrario, la mayoría de adultos mayores solo experimentan un deterioro level de las facultades cognitivas, el cual normalmente ocurre durante el envejicimento, mas no desarrollan demencia.
¿Qué le pasa a una persona con demencia?
Todas las personas con demencia causada por una enfermedad neurodegenerativa tienen diferentes síntomas, según la causa y el estadío de su enfermedad. Los síntomas de una persona dependen de qué parte del cerebro se ve afectada por la enfermedad neurodegenerativa, y pueden cambiar con el tiempo a medida que la enfermedad progresa y afecta otras partes del cerebro. Diferentes enfermedades neurodegenerativas afectan diferentes partes del cerebro. Por ejemplo, la enfermedad de Alzheimer tiende a afectar la parte del cerebro que se ocupa de formar memorias nuevas, es por esto que la pérdida de la memoria reciente generalmente es uno de los primeros síntomas de la enfermedad. Otros síntomas comunes en personas con demencia incluyen dificultades con la comunicación, planificación y organización, navegación, cambios de personalidad y síntomas psiquiátricos como depresión, ansiedad, delirios y alucinaciones.
¿Hay medicamentos para tratar la demencia?
No hay cura para la demencia causada por las enferemedades neurodegenerativas, pero existen medicamentos que pueden tratar los síntomas de estas enfermedades, y así mejorar la calidad de vida de las personas afectadas. Algunos medicamentos ayudan a mejorar la memoria, mientras que otros son efectivos para mejorar trastornos del estado de ánimo, como la ansiedad y la depresión, que frecuentemente ocurren en personas con demencia. De igual manera es importante considerar la posibilidad que la persona con demencia este tomando medicamentos que podrían empeorar los síntomas de demencia.
¿Qué más puede ayudar a una persona con demencia?
Muchos estudios científicos han demostrado que el ejercicio físico ayuda a mejorar la salud del cerebro, mejora el estado de ánimo y el estado físico general, y puede ayudar a prevenir la demencia. Asimismo, una dieta equilibrada y saludable para el corazón, como la dieta MIND (basada en la dieta mediterránea y DASH para la hipertensión) también es importante. De igual manera, es recomendable el consumo de bebidas alcohólicas en exceso, las cuales pueden dañar la salud cerebral. Estudios científicos también demuestran que el mantenimiento de buenos hábitos de sueño también es una herramienta importante para proteger la salud de nuestro cerebro; esto involucra mantener rutinas alrededor de los ciclos del sueño y saber reconocer y tratar diversos trastornos del sueño. También se ha demostrado que es importante mantener una vida social activa y placentera, y que las actividades que son mentalmente estimulantes y placenteras ayudan a promover nuestra salud cerebral. Finalmente, es importante tener presente que existen varias otras condiciones medicas que directa o indirectamente afectan nuestra salud cerebral, como son la diabetes, la presión alta, y el colesterol alto; es importante que trabajemos con nuestro médico de cabecera para mantener estas y otras condiciones médicas bajo control para así mantener nuestro cerebro saludable.